NO EN EL DINERO. Jay Gould, el millonario norteamericano, al morir dijo: «Supongo que soy el hombre más miserable sobre la tierra.»
NO EN EL PLACER. Lord Byron, quien vivió una vida de placeres y comodidad, escribió: «El gusano, el cáncer y la pena son sólo míos.»
NO EN EL PODER MILITAR. Después de que Alejandro el Grande había conquistado el mundo entonces conocido, lloró en frustración porque no había más mundos que conquistar.
NO EN LA INCREDULIDAD. Voltaire, el notorio incrédulo, escribió: «Desearía no haber nacido nunca.»
NO EN LA POSICION Y EN LA FAMA. Lord Baconsfield disfrutó de las dos cosas en muy buena proporción, pero escribió: «La juventud es una equivocación; la adultez es una lucha; la vejez es una pena.»
¿DONDE ESTA LA FELICIDAD? La respuesta es simple: Solamente en Cristo. El dijo: «…y se gozará vuestro corazón, y nadie os quitará vuestro gozo.» Juan 16:22