El precio de una barra de acero es cinco dólares. Cuando se transforma en herraduras, vale diez dólares. Si se transforma en agujas, vale trescientos cincuenta dólares, en hojas de cuchillos su precio asciende a treinta y dos mil dólares. Si con ello se hacen cuerdas para relojes, su precio se calcula en dos ciento cincuenta mil dólares. ¡Que de golpes tan terribles tiene que sobrellevar dicha barra para llegar a valer esto! Pero cuanto mas manipulada ha sido, cuantos mas martillazos ha recibido y ha sido pasada por el fuego, golpeada, machacada y pulimentada, su valor es mayor.
¡Ojala que esta parabola nos ayude a guardar silencio, a permanecer quietos y a soportar el sufrimiento! Los que mas sufren, son capaces y pueden producir mas; y el sufrimiento es el medio que Dios esta utilizando para sacar cuanto puede de nosotros, para Su gloria y la bendición de otros.
La vida es muy misteriosa. Verdaderamente seria inexplicable, a no ser que creyesemos que Dios nos esta preparando para escenas y ministerios que se encuentran mas alla del mundo que vemos, en el mundo eterno donde espíritus grandemente templados seran requeridos para servicios especiales.
«Hare que seas un trillo cortante nuevo» Isaias 41:15
Fuente: la Sra. Charles E. Cowman